El bienestar físico, emocional y espiritual se basa en diversos factores, pero indudablemente uno de los más importantes se encuentra en la salud, término usado muy a menudo que significa equilibrio, ausencia de enfermedad y condición de sano. Es lógico pensar que al estar bien en cuerpo, vamos a tener la suficiente capacidad para llevar a cabo nuestras actividades cotidianas en el trabajo, en el hogar, en el estudio y actividades paralelas a la vida de los seres humanos. Cuando hay desequilibrio, la falta de entusiasmo, vitalidad, energía decrecen radicalmente. Es en ese sentido, que uno de los pilares de nuestra salud, lo constituye el cuidado de la Cavidad Oral, concepto que en nuestra población es a veces dejado muy de lado, y es por esa razón que nuestra población sufre de caries dental en aproximadamente un 98%.
El malestar ocasionado por los desórdenes de las enfermedades bucales, conlleva a un sinnúmero de complicaciones, muy incómodas en la mayoría de los casos y fatales en algunos. Lo que sí provoca es un impacto psicológico negativo, especialmente en el sexo femenino.
Es a este nivel que la información forma un papel muy importante, brindándole al sujeto la oportunidad de conocer realmente lo que acontece con su cuerpo y específicamente con su entorno oral. La información lo proveerá de las herramientas necesarias para formar en él una conciencia, un hábito y lo más importante, se le brindará un concepto más para su formación educativa.
La divulgación de tales conocimientos no sólo quedarán en él, sino que serán transmitidos hacia sus familiares, amigos y conocidos y a su vez se creará una red inmensa de conocimientos valiosos para el cuidado de este templo que es nuestro organismo.